14 de diciembre de 2008

La Ultima Noche

No estoy segura de querer escribir sobre esto. No estoy segura de estar lista para escribir sobre esto, pero si estoy absolutamente convencida que lo que estoy viviendo merece un post, asi que aqui estoy, rompiendo este silencio que lleva varios meses, para contar que finalmente ha llegado mi ultima noche en Nueva York.

Puedo escribir paginas y paginas tratando de describir esta ciudad, pero la verdad es que solo aquellos que han vivido aca me entenderian. Solo aquellos que se han enamorado de su ritmo y sus sonidos pueden entender que de cierta manera me rompe el alma tener que dejarla, aunque, por otro lado, tengo absolutamente claro que no es la ciudad en la cual querria desarrollar mi vida. Pero dudo que llegue un momento en que uno pueda decir que esta listo para dejar NYC, y eso es lo que experimento ahora; porque quisiera poder recorrer una vez mas Central Park y perderme en sus senderos, ir a Rockefeller Center a ver el arbol de navidad o las vitrinas navide#as de Saks, caminar por el Village, donde cada calle tiene atractivo especial, irme de juerga al Meatpacking o tener un ultimo brunch en Brooklyn con las chicas. Pero ya no hay tiempo, y los recuerdos y las expectativas de futuras visitas tendran que bastar por ahora.

La persona que llego a esta ciudad es tan distinta a la que se va manana, que a veces me da susto que aquellos que me conocieron antes no me reconozcan. O que yo no los reconozca a ellos. No puedo asegurar que soy una mejor persona, pero si cambie de tal manera que puedo decir que vivir en esta ciudad me ha hecho sentir plena como jamas nunca antes lo senti. Probablemente es por la cercania con mi partida, pero no recuerdo un momento de tristeza. Por supuesto hubo momentos no tan felices, porque ciertamente trabajar a las 4 de la manana en un fin de semana no es uno de mis panoramas favoritos, o al saber a mis amigos y a mi familia lejos y con sus propios problemas y sentir impotencia al respecto, pero honestamente puedo decir que este tiempo aca ha sido el mas feliz de mi vida.

Y mencion aparte merecen todos mis amigos aca. Aquellos que traje de Chicago o que llegaron de Chile y aquellos que conoci aca. Sin ellos, mi experiencia aca no habria sido ni remotamente igual a lo que fue, y les estare por siempre agradecida por estar conmigo. Fueron no solo mis amigos, sino que tambien mi familia en estos lados y reconozco que no puedo imaginar como va a ser estar sin hacer planes con ustedes o siquiera pasar los dias sin ver a aquellos que veo todos los dias.

OK, oficialmente tengo que dejar de escribir antes que termine al borde del llanto. Solo queda agradecer por vivir esta experiencia y prometer que volvere, ojala mas temprano que tarde, a pasearme por estas calles que se convirtieron en mi hogar, y que de cierto modo, lo seran para siempre.